TEMA 1.- La Organización escolar: objeto, contenido y evolución:
Mapa conceptual:
Mapa conceptual:
Reflexión:
Considero este primer tema como muy importante dentro de la organización de todos los sistemas educativos, pues comprende unas características generales de su estructura y funcionamiento. Como futuros profesores, debemos tener muy claro cual es el funcionamiento del sistema educativo y todos los apartados que en este mapa conceptual se desarrollan. También debemos ser conscientes de que esto no es un simple mapa conceptual que queda aquí plasmado, si no que tiene que ser un esquema mental en nuestra cabeza para tener claro cómo se organiza todo lo que nos concierne.
La organización es, por tanto, una acción, un proceso
que se está continuamente realizando
y demandando diferentes actuaciones, así
pues, es una entidad propia que evoluciona
y se transforma.
En la educación primaria y secundaria,
ORGANIZACIÓN ESCOLAR es la ciencia
de las organizaciones y los sistemas transorganizadores
de índole escolar con importantes
conexiones con la didática y las
organización en general.
La acción de organizar es cambiar los
distintos elementos del centro para que
funcione bien, alcance los objetivos propuestos
trabajando con menos esfuerzo y
alcanzando mayor calidad.
HACIA UN ESTILO DE APRENDIZAJE DE LAS ORGANIZACIONES EDUCATIVAS
José Cardona Andújar.
Comentario del artículo:
En el artículo, Cardona Andújar nos hace una reflexión sobre el estilo de aprendizaje de las organizaciones educativas, como seres vivos que se desarrollan y en esto, constituyen un sistema con diversos elementos que interactúan, cambian y evolucionan. Habla por tanto de organización como “entidad resultante de la adecuada combinación de una serie de medios humanos, funcionales y materiales disponibles, y que, en el marco de unas relaciones determinadas, se orienta a la consecución de unos objetivos”. Por consiguiente se entiende a la escuela como un sistema u organización compleja con unos roles y sobre unos objetivos marcados a cumplir. Esto se ve desde una perspectiva de microsociedad con características propias tales como cultura, o clima particular.
Las Organizaciones pueden aprender y mejorar o estancarse. Trasladando esto a los centros educativos, Cardona Andújar observa cuatro tipologías de centros:
-Estancados, en los que existe una percepción o sentimiento de fracaso, y donde es difícil emprender procesos de cambio.
-Paseantes, tradicionales, con estabilidad en el profesorado y donde se rememoran los éxitos pasados, siendo reticentes a nuevos cambios
-Desencaminados, se esfuerzan en un cambio aunque en demasiados ámbitos, por lo que no consiguen lo que se proponen. No encuentran claridad en los objetivos y en las prioridades. Necesitan una orientación y un asesoramiento eficaz.
-Dinámicos, con una armonía entre estabilidad y cambio, metas claras y recursos suficientes para abordarlas; apoyan su actividad en el trabajo en equipo o colaborativo, y fundamentan sus líneas de mejora en procesos sistemáticos de autoevaluación. Son estos centros lo que están en condiciones adecuadas para conseguir un aprendizaje organizativo.
Las organizaciones que aprenden pueden cambiar y ofertar las respuestas adecuadas a la sociedad, potenciar su crecimiento y auto revisarse para mejorar. Según su juicio, la organización que aprende debe tener las siguientes características:
1. Capacidad para diagnosticar situaciones o líneas de funcionamiento susceptibles de mejora.
2. Abordar sistemáticamente la solución de sus problemas.
3. Perseguir la búsqueda constante y metódica, desde el estilo más apropiado, de nuevo conocimiento organizativo.
4. Ser capaces de consolidar su propio aprendizaje.
5. Estar en buena disposición para transferir, a corto plazo, el saber adquirido a nuevas situaciones.
Para ello, se debe promover una serie de relaciones con el alumno, profesores, familias y comunidad en general.
Cardona clasifica el aprendizaje organizativo según la habilidad y la capacidad. Habilidad como capacidad manual y capacidad como sinónimo de aptitud. Llevándose al término de aprendizaje generativo. Es necesario también un aprendizaje individual para adquirir ciertos saberes y experiencias. No obstante, ambos tipos de aprendizaje (generativo y acumulativo) deben complementarse y enfocarse a la construcción de saberes para transformar los centros.
Respecto a los estilos, Cardona cita que cada organización comprende un estilo propio aunque se diferencian claramente dos: El técnico-practico, que produce un saber experimental fundamentado en la práctica organizativa, escasamente reflexiva y con una actividad normativa, pero que cuestiona la innovación, y el estilo tecnológico-científico basado en la explicación real de la organización y con unos objetivos enfocados a la transformación con alternativas fundamentadas, que conducen al “saber por qué se hace”. En conclusión, diremos que para una buena gestión, todo centro debe saber combinar ambos estilos.
Como agentes favorecedores del aprendizaje, el autor propone los siguientes principios:
-La concienciación de los diferentes estamentos comunitarios.
-La optimización del conocimiento de los roles de cada miembro del centro.
La emergencia y consolidación de una cultura genuina, singularizada, en cada centro y su comunidad.
-La sensibilización de la comunidad educativa de cada centro hacia actuaciones de auto-revisión crítica.
-El impulso sustantivador de la formación permanente.
Es relevante la conciencia autoevaluadora que cobra el método, reforzando la coherencia en los equipos y ayudando al propio perfeccionamiento de los profesores.
Como conclusión final Cardona deriva una serie de planteamientos que considera necesarios para la escuela que aprende, tales como: promover el desarrollo profesional de los profesores, potenciar las relaciones con la comunidad educativa, fomentar una metodología colaborativa, generar un clima adecuado, diagnosticar las posibles líneas de mejora, asumir la particularidad de cada alumno y enseñar en consecuencia, planificar y actuar teniendo en cuenta las experiencias preescolares y extraescolares del alumnado y concebir la calidad educativa como referente a seguir. Con esto, las organizaciones aprenderán fundamentándose en las bases sólidas que estos elementos otorgarán siempre encaminándolo a la dimensión tecnológico-científica citada antes. Vídeo de Miguel Ángel Santos Guerra.
Reflexión:
En este video Santos Guerra nos habla del profesor como una ayuda para la educación. Debemos ser un soporte para que los alumnos se apoyen en nosotros y se lancen al mundo del conocimiento útil. No podemos concebir las escuelas como un sistema para perpetuar la sociedad, o para reproducir la misma situación, sino que debemos hacer una escuela con una visión de institución transformadora. Además, no solo debemos tener el cuenta el proceso cognitivo, sino que hay que valorar el carácter afectivo y las relaciones profesor-alumno.
Se debería cambiar el sistema de formación y selección del profesorado, como punto de partida para una transformación eficaz. El profesor debe ser capaz de transmitir, de ayudar, de enseñar... y no solo tener muchos conocimientos acumulados. En cuanto a la selección debemos barajar el caso de cada persona que quiere formarse como tal, como ya se hace en muchos otros países y destinar los mejores y más preparados de cada área a una formación específica para aprender a enseñar. Además, se debe experimentar para mejorar lo que se hace, y no atascarse en una inmovilidad reticente. El profesor debe estar al servicio para la mejora de la educación y la sociedad.
Fuentes consultadas:
- http://www.techtraining.es/revista/numeros/PDF/2009/revista_2/19.pdf
- Artículo: HACIA UN ESTILO DE APRENDIZAJE DE LAS ORGANIZACIONES EDUCATIVAS, de José Cardona Andújar.
- Video de Miguel Angel Santos Guerra.